ARTESANÍA
Utensilio, talismán, símbolo: la belleza era el aura del objeto, la consecuencia –casi siempre involuntaria- de la relación secreta entre su hechura y su sentido. La hechura: cómo está hecha una cosa; el sentido: para qué está hecha. […]
El objeto artesanal satisface una necesidad no menos imperiosa que la sed y el hambre: la necesidad de recrearnos con las cosas que vemos y tocamos, cualesquiera que sean sus usos diarios. […]
[…] Hecho con las manos, el objeto artesanal guarda impresas, real o metafóricamente, las huellas digitales del que lo hizo. Estas huellas no son la firma del artista, no son un nombre; tampoco son una marca. Son más bien una señal: la cicatriz casi borrada que conmemora la fraternidad original de los hombres. Hecho con las manos, el objeto artesanal está hecho para las manos; no sólo lo podemos ver, sino que lo podemos palpar. […]
[…] La artesanía no quiere durar milenios ni está poseída por la prisa de morir pronto. Transcurre con los días, fluye con nosotros, se gasta poco a poco, no busca a la muerte ni la niega: la acepta. Entre el tiempo sin tiempo del museo y el tiempo acelerado de la técnica, la artesanía es el latido del tiempo humano. Es un objeto útil pero que también es hermoso; un objeto que dura pero que se acaba y se resigna a acabarse; un objeto que no es único como la obra de arte y que puede ser reemplazado por otro objeto parecido pero no idéntico. La artesanía nos enseña a morir y así nos enseña a vivir.
Los conocimientos, las técnicas y los objetos producidos dan cuenta de una manera concreta de obtener y tratar los recursos que aporta el territorio isleño, del modo en que se transmiten y se aprenden los conocimientos heredados y de una particular forma de vida que el tiempo y la gente modela continuamente.
Barro, arena, hojas de palma, piel de cabra, piedras, varas de caña, pelo de oveja y tallos de junco han sido algunas de las materias primas locales utilizadas en la fabricación de objetos para el uso cotidiano o ritual por los antiguos majoreros. Otras materias primas, conocimientos y herramientas de trabajo fueron aportados por los diversos pobladores que arribaron a nuestra costa con la Conquista de la Isla y su posterior colonización. Todos estos conocimientos han llegado hasta nuestros días como fruto de la transmisión generacional y de la recreación continua por manos artesanas. Es nuestra obligación y responsabilidad que las generaciones futuras puedan disponer de estos saberes y destrezas.
El objeto artesanal satisface una necesidad no menos imperiosa que la sed y el hambre: la necesidad de recrearnos con las cosas que vemos y tocamos, cualesquiera que sean sus usos diarios. […]
[…] Hecho con las manos, el objeto artesanal guarda impresas, real o metafóricamente, las huellas digitales del que lo hizo. Estas huellas no son la firma del artista, no son un nombre; tampoco son una marca. Son más bien una señal: la cicatriz casi borrada que conmemora la fraternidad original de los hombres. Hecho con las manos, el objeto artesanal está hecho para las manos; no sólo lo podemos ver, sino que lo podemos palpar. […]
[…] La artesanía no quiere durar milenios ni está poseída por la prisa de morir pronto. Transcurre con los días, fluye con nosotros, se gasta poco a poco, no busca a la muerte ni la niega: la acepta. Entre el tiempo sin tiempo del museo y el tiempo acelerado de la técnica, la artesanía es el latido del tiempo humano. Es un objeto útil pero que también es hermoso; un objeto que dura pero que se acaba y se resigna a acabarse; un objeto que no es único como la obra de arte y que puede ser reemplazado por otro objeto parecido pero no idéntico. La artesanía nos enseña a morir y así nos enseña a vivir.
Octavio Paz
(1998) El uso y la Contemplación Revista de Camacol v. 11(1): Edición 34, marzo 1988, pp. 120-125.Patrimonio Cultural
Los oficios artesanos de Fuerteventura forman parte del Patrimonio Cultural de Canarias.Los conocimientos, las técnicas y los objetos producidos dan cuenta de una manera concreta de obtener y tratar los recursos que aporta el territorio isleño, del modo en que se transmiten y se aprenden los conocimientos heredados y de una particular forma de vida que el tiempo y la gente modela continuamente.
Oficios artesanos
Oficios artesanos Legado de nuestros antepasados, estos oficios artesanos son el resultado de los procesos que han configurado el contexto histórico de la isla de Fuerteventura, al tiempo, que han contribuido a modelar ese contexto.Barro, arena, hojas de palma, piel de cabra, piedras, varas de caña, pelo de oveja y tallos de junco han sido algunas de las materias primas locales utilizadas en la fabricación de objetos para el uso cotidiano o ritual por los antiguos majoreros. Otras materias primas, conocimientos y herramientas de trabajo fueron aportados por los diversos pobladores que arribaron a nuestra costa con la Conquista de la Isla y su posterior colonización. Todos estos conocimientos han llegado hasta nuestros días como fruto de la transmisión generacional y de la recreación continua por manos artesanas. Es nuestra obligación y responsabilidad que las generaciones futuras puedan disponer de estos saberes y destrezas.